...no busques compañía.

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domingo, 13 de octubre de 2013

Sincericidios

Mi hermano está
al lado mío escuchando música
por eso escribo después de años
su iniciativa lo trajo
y comimos
Es raro
mi hermano no se
caracteriza por
la iniciativa. supongo
que la dosifica
celosamente
para utilizarla
sólo
cuando entiende que algo debe
modificarse.
cuando sucede
es radical
por lo menos para
mí.
entonces acá estamos
ha detonado algo
decididamente,
como aquella vez
que me salvo.
nunca le pregunté al respecto

que es mejor dejar
toda esa charla en el
silencio
Ahora es música.
Él mira el piso
retuerce el celofán de mis cigarrillos
y yo escribo
con su permiso implícito
No pregunta,
escucha el sonido
de las teclas
que me delata
Mi hermano me guardó un cerebro de merluza
y es que
había que reemplazar el mío
que ya no servía, me había ahogado
así me salvó mi hermano.
mañana trabaja temprano
se desprendió de la música para irse
y la dejó flotando
sé que no voy a seguir escribiendo,
no
con la misma fluidez
Yo nadaba detrás de un compañero de la secundaria
y me hundí en el agua verde
Me salvo
un pez dorado
que me llevó hacia la costa
con una ternura enorme. Era mi hermano.
“Yo lo guardé”
(abrió una caja y me mostró el pequeño tesoro)
“y lo voy a obligar a papá
a que haga el transplante
…el tuyo ya no sirve…”
Todavía tengo nítida su cara desfigurada por el sol
y toda la escena:
él y yo en la costa
como un naufrago y una sirenita
Todavía tengo intacta
la gratitud

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